Poner límites, también en Navidad

La Navidad suele asociarse a encuentros, celebraciones y seres queridos. Sin embargo, para muchxs, también es una época donde aparecen comentarios invasivos y dolorosos.

Preguntas acerca de tu vida sentimental, tu cuerpo y sobre decisiones vitales tuyas siguen siendo habituales en estas fechas. Aunque, a menudo, se esconden detrás de “bromas”, la realidad es que pueden generar un malestar profundo.

Si este año quieres cuidarte un poquito más, aquí y dejamos algunas ideas para que te sea más sencillo poner límites y gestionar mejor esos comentarios sin sentir culpa.

Algunas claves que pueden ayudarte:

1.Poner el límite desde la calma --> el límite no necesita ser puesto desde el enfado para ser respetado.

• “Entiendo que te genere curiosidad, pero no me siento cómodx con ese comentario.”

• “Prefiero que no comentemos sobre mi cuerpo.”

2.Cambiar el foco de atención.

• “Cambiemos de tema.”

• “Prefiero no hablar de eso; ¿cómo te va a ti?

3.El humor como protector

• "Este tema no entra en el menú navideño."

• "Cerrado por vacaciones."

4.El límite corporal

• Ir a por algo.

• Cambiar de asiento.

En suma, puede ayudarte recordar que el hecho de que estos comentarios sean algo habitual no los convierten en adecuados. Y es por ello que, poner límites, no es faltar al respeto, es cuidarse a unx mismx.

Recuerda: estas Navidades tienes derecho a 1) no responder; 2) cambiar de tema; 3) irte si no te sientes cómodx; 4) priorizar tu bienestar emocional.

¡Os deseamos unas Navidades donde podáis escucharos (y escuchar) desde el respeto y el cuidado!